El violeta o morado fue el primer color utilizado por las sufragistas inglesas en 1908, aunque hay otras teorías. Según una de estas hipótesis, el violeta sería resultado de la mezcla de dos colores, el azul y el rosa, que simbolizan la igualdad de género.
También se asocia con la tragedia del 25 de marzo de 1911, cuando más de 140 trabajadores de la fábrica téxtil Triangle Shirtwaist de Nueva York fallecieron en un incendio y el humo que salía de la fábrica era violeta, supuestamente las prendas que confeccionaban eran de ese color.
Por otra parte, la escritora Gemma Lienas fue la primera en utilizar una metáfora que luego también adoptó el movimiento feminista. Para ella, el violeta es el color del feminismo, el mismo color que las gafas con las que se debe mirar el mundo.
Blanco y Verde también representan al feminismo
Otros colores asociados al feminismo son el blanco y el verde, colores que utilizó Emmeline Pethick-Lawrence, activista británica que luchó por conseguir el voto para las mujeres entre 1903 y 1917.
El verde representa la lucha que han tenido las mujeres por el derecho a decidir sobre su cuerpo, además de representar el aborto legal, seguro y gratuito. Este color es utilizado por la Marea Verde, movimiento social que se ha extendido por el mundo.