Mérida, Yucatán. — En medio del proceso electoral del Poder Judicial Federal, el juez Héctor Roberto Capetillo Lizama, candidato a Juez de Distrito Penal Federal, alza la voz no solo para defender su lugar dentro del sistema de justicia, sino para reivindicar una faceta muchas veces ignorada en la carrera judicial: la formación de nuevas generaciones.
Con la boleta amarilla número 11, Capetillo no es solo un juez con experiencia; es también un maestro apasionado que, cada martes y jueves, transforma el aula en un espacio de reflexión y aprendizaje compartido.
“Hoy tengo el privilegio de ser profesor de Derecho Procesal Penal, una labor que me pone muy feliz. No sé si esta vocación nació al ver a mi madre, que fue maestra, pero lo cierto es que enseñar es, sobre todo, aprender. Cada alumno también me enseña”, compartió el candidato en sus redes sociales.
Una campaña desde el aula: enseñar también es impartir justicia
A lo largo de su trayectoria, Capetillo ha impartido clases a nivel licenciatura en distintas instituciones, convencido de que la formación jurídica debe ir más allá del código y las normas, y conectar con los valores de justicia, ética y compromiso social.
“Gracias a mis estudiantes por inspirarme y a todos mis colegas por compartir esta hermosa misión. La justicia también se construye en el aula”, expresó.
Una candidatura que representa experiencia, integridad y formación
En un contexto donde la sociedad exige jueces cercanos, íntegros y preparados, la candidatura de Héctor Capetillo resalta por su perfil académico, su vocación de servicio y su capacidad para formar a las y los futuros operadores del sistema penal.
Más allá de buscar un puesto, Capetillo defiende con hechos su compromiso con el país, apostando por una justicia humana, eficiente y pedagógica.